Durante más de 25 años, nuestra empresa ha crecido en cuanto a experiencia se refiere, pero la experiencia nos trae un regalo impresionante que nuestros clientes adoran: la paciencia de nuestros instructores.
¿A cuántos de nosotros no se nos ha ocurrido pedirle a un amigo que nos enseñe a manejar o incluso a nuestros padres? y luego nos damos cuenta que se desesperan, o no saben como enseñarnos correctamente.
La paciencia es una virtud con la que no todos cuentan
La paciencia es una virtud con la que no todos cuentan, y es el primer factor por el cual los aprendices le tienen miedo a conducir. Cuando la persona que les enseña no soporta que se les apague el carro o no pueden frenar a tiempo, los estudiantes se estresan y los amigos o familiares inexpertos recurren a criticar o incluso a gritarles, lo cual es peor.
Los estudiantes a la larga deciden abandonar el proceso de aprendizaje y se crea un sentimiento de impotencia y de temor a conducir, esto sucede por el simple hecho de que creen que todos los que enseñan son así.
Sabemos como tratar a personas con miedo y con poca experiencia
En Driving Center Panamá, nuestros instructores cuentan con experiencia tratando con conductores que nunca en su vida han tocado un vehículo, lo cual les permite saber cómo debe ser el trato ante una persona con miedo y con poca experiencia en el manejo y esta es una de las principales razones por la cual nuestros clientes nos escogen.
La experiencia, el buen trato y sobre todo la paciencia que tienen nuestros instructores nos caracterizan al momento de enseñar a manejar.
En nuestra escuela de manejo contamos con cursos para personas que no saben conducir o que incluso nunca han tocado un vehículo en su vida, realmente nos apasiona enseñar y sobretodo nos encanta ver el progreso de nuestros estudiantes cuando por fin obtienen su licencia de conducir.